7/12/09

Sábado

.

La entrada a la loma estaba cubierta de barro. Igual caminábamos. Sobre los ladrillos que eran cilíndricos para no hundir los zapatos. También bajábamos al pasto. Mirábamos los cerros de Pamplona y Casuarinas. Las casas miniatura y los edificios blancos. Una avioneta pasó como hace tiempo pasaba. Otra avioneta repitió el vuelo y la acrobacia. Los pilotos se iniciaban con un examen aéreo un sábado por la tarde. Ya estábamos cerca. Había una niña jugando con su padre que sólo vigilaba que la niña no vaya a perderse. Ella jugaba a preparar estofado con piedras y ramas. Subía y bajaba la pequeña pendiente. Yo intentaba no resbalarme por la misma pendiente, aunque era divertido sostener mi peso en las rodillas y los pie. Eres más fuerte que yo y no lo dudo porque me alzas con un brazo. "Mira las islas cómo parecen nubes". Sí, las islas en el mar, verlas desde aquí es alucinante. Todo esto es alucinante.

.

No hay comentarios:

Publicar un comentario